3 tendencias gastronómicas para 2024.
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En el 2024, continuaremos con la tendencia que pone en valor la alimentación de proximidad, pero con una visión más internacional y digital. Así podrían resumirse, a grandes rasgos, las tendencias gastronómicas en la industria alimentaria para el año que está a punto de empezar.
Aunque algunas cosas tardan en cambiar, estas corrientes vienen produciéndose desde hace tiempo y en los próximos meses asistiremos a la consolidación de muchas de las tendencias que hemos ido observando en los últimos tiempos. Más allá de modas, se trata de cambios necesarios, a veces promovidos por los consumidores y otras veces, impulsados por las regulaciones que en todo caso serán asumidas por el sector Horeca.
En este post repasamos algunas de los principales cambios que podemos esperar en referencia a cuándo, cómo y qué comeremos, pero también en la manera en que se producen, con una especial mirada a la sostenibilidad, la economía circular y las nuevas tecnologías.
Gastronomía global
Nigiri, Taco, Pollo tandoori, Bratwurst, Dim sum, Gallo Pinto entre otros. Seguramente todos estos platos son conocidos por ti y por tus clientes Y es que, más allá de la internacionalización de platos como la paella, la pizza o el sushi, la globalización ha llegado también a la gastronomía y cada vez es más frecuente que todo tipo de establecimientos de restauración ofrezcan en sus menús y cartas platos que solo se podían encontrar fuera de nuestras fronteras. El boom turístico postpandemia también ha facilitado que nos acostumbremos a estos nuevos sabores, aromas, texturas y presentaciones, lo que permite que las cartas sean más exóticas y diversas.
Economía circular
Hay varios conceptos detrás de las estrategias de economía circular que son aplicables al sector agroalimentario, como promover la alimentación circular y las elaboraciones con productos de temporada. El reto es que podamos hacer elaboraciones globales (lo ligamos con la tendencia anterior) con aquellos productos que tenemos más cercanos, evitando así que los alimentos tengan que emprender largos viajes o ser cultivados fuera de temporada, con el consiguiente impacto medioambiental que ello pueda conllevar. Todo esto sin dejar de lado el evitar generar desperdicios innecesarios. La alimentación circular también engloba la cocina de aprovechamiento, a la que tanto uso dieron las abuelas. Se trata de aprovechar todo lo que adquiramos en nuestro establecimiento. Cuando no sea posible existen alternativas que se puede dar una última oportunidad a los alimentos (como la aplicación Too Good to Go) es otra opción que siempre debemos tener en mente. Estos sistemas permiten vender excedentes a precios reducidos, lo que minimiza el desperdicio y beneficia tanto para los restaurantes como a usuarios.
Digitalización gastronómica
Todos los negocios (independientemente de su tamaño) deben de subirse a el tren de la digitalización, puesto que esto les permite ser más operativos, funcionales, productivos, competitivos y tener la capacidad de minimizar errores. Por ejemplo, a la hora de hacer reservas de mesas o pedidos podemos utilizar aplicaciones específicas en las que sea el propio cliente el que facilite los datos reduciendo dramáticamente el margen de error. Esto, a su vez, nos permite una mejor gestión de stocks y financiera, estando en control de mercancías que tenemos en almacén o incluso realizar futuros pedidos a proveedores automáticamente. Lo que nos permitirá que podamos dedicar nuestro tiempo a lo que verdaderamente importa: el cliente.